Monday, August 20, 2007

Fortaleza estoica: protesta universal

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El regusto que nos deja la actualidad, después de sumergirnos un rato en su variopinta movida interminable, es el de una protesta universal. Todo el mundo se queja de algo. Todo el mundo está descontento de algo. Nadie imagina al pobre hidalgo empobrecido protestando, lamentando, lamentando su suerte o, simplemente, quejándose.

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Por Tomás Salas

El informativo de hoy -puede ser el de cualquier día- me trae distintos hechos que, por encima de su diversidad, presentan una machacona constante. Vean: trabajadores de una ciudad de Cádiz, en España, y sus esposas se echan a la calle para protestar por el cierre de su empresa. Vecinos de una ciudad costera hacen una manifestación para evitar la construcción de un complejo urbanístico. Policías de paisano se manifiestan y piden mejoras en sus condiciones laborales. En el lejano Irak naturales del país, airados y barbudos todos, se rebelan contra la presencia militar americana, a la que culpan de desórdenes y muertes. Un grupo de militantes de un partido protestan por una decisión del gobierno en un lugar atípico: la puerta de un hospital. A esto se podría añadir un largo etcétera.

El regusto que nos deja la actualidad, después de sumergirnos un rato en su variopinta movida interminable, es el de una protesta universal. Todo el mundo se queja de algo. Todo el mundo está descontento de algo. La ley en la que se basa cualquier ciudadano, creída como un dogma no necesitado de demostración, tiene un artículo primero y pricipal que dice: yo tengo derecho a... Todo hijo de vecino pide. ¿A quien? ¿Hay alguien, alguna institución o persona que tenga capacidad de atender tantas demandas y al mismo tiempo? Es imposible. Todo el mundo protesta. ¿A quién? ¿Hay alguien que tenga el onmimodo, casi infinito poder de recoger, valorar y contestar a todas estas protestas? Nadie en nuestra sociedad sabe disimular su dolor, molestia o desgracia.

Recomiendo, como antídoto a este descontento general, la lectura de una de las páginas más bellas de la literatura española, el Tratado III de “El Lazarillo del Tormes”, que nos cuenta “ Como Lázaro se asentó con un escudero, y de lo que le acaeció con él”. Lázaro, después de haber pasado por unos cuantos amos despiadados y tacaños, viene a dar con uno de buen porte y agradable trato. Augura, erróneamente, que con él mejorará su mala vida. Pero este pobre escudero es tan desgraciado como Lázaro. Empobrecido -nunca fue rico, de todas formas- tiene que ocultar su indigencia sin perder la compostura, sin descomponer su cuidada imagen. No puede quejarse, ni siquiera reconocer su hambre. A pesar de su disimulo, no creo que su actitud pueda ser tachada de hipocresía.

Un fondo de fortaleza estóica -ese estoicismo tan hispano, del que María Zambrano ha escrito cosas bellísimas-, de nobleza quijotesca nos lo hace simpático. Hay algo que lo coloca en un plano de superioridad moral: no exige a los demás, sino a sí mismo. Su vida es un esfuerzo de autodisciplina y renuncia. Con los demás es amable y comprensivo.

Nadie imagina al pobre hidalgo empobrecido protestando, lamentando su suerte o, simplemente, quejándose. Sería curioso saber qué pensaría nuestro personaje, ocultador de sus hambres y remiendos, esclavo de su imagen, de esta situación de impúdica quejumbre, de esta protesta universal.

Ricos banquetes de literatura erótica

Servicios Google/ LA NACION, Ar.

Martes eróticos . Lecturas y selección de textos: Igrid Pelicori y Horacio Peña. Puesta en escena: Rubén Szuchmacher. Iluminación y sonido: Safe. Producción: Alejandra Ramírez. Martes, a las 20, en La Bodeguita, Sarmiento 1594, 4375-3388. Duración: 120 minutos (con cena incluida e intervalos).
Nuestra opinión: muy buena

El Babilonia -allá en la calle Guardia Vieja- era uno de los lugares más adorados por aquellos teatreros del under porteño, por donde circularon movidas importantes como Fragmentos de una (H)erótica o Abasto en sangre . En 1998, poco tiempo antes de cerrar sus puertas, estrenó una de sus últimas joyas: el banquete literario Martes eróticos , con Ingrid Pelicori y Horacio Peña, dirigidos por Rubén Szuchmacher.

Casi ocho años después, este terceto de amigos retomó la idea y reformuló dos "banquetes literarios", que alternarán cada martes (como para repetir). El lugar elegido ahora es La Bodeguita, en pleno corazón del centro porteño. Es el amable sótano de un restaurante, a su vez, convertido en restaurante-concert. Allí, sobre el pequeño escenario, hay una mesa preparada para la cena. Abajo, las mesas son varias. Los espectadores saborean un menú supuestamente afrodisíaco (quien esto escribe no entiende mucho del tema) con papas bravas o que tienen salsa de apio, unos penne rigatti con salsa putanesca o una banana con salsa de chocolate de postre. Lógicamente, acompañados de buenos vinos y champagne. Y sobre el escenario aparecerán los intérpretes para comer a la par y charlar entre ellos, hasta que al finalizar cada plato real, harán un plato literario que consiste en una perfecta selección de cuentos, frases, fragmentos y diferentes tipos de lecturas relacionadas con el erotismo o con el amor vinculado a lo erótico.

Hay textos de una poesía brutalmente bella, los hay con mucho humor, otros de contenido crudo y movilizante, y algunos con palabras gruesas que no le quitan ni su valor literario ni su peso erótico. Es en el decir donde el trazo grueso se puede volver fino. Y eso lo logran los grandes intérpretes. Es que eso de llamar "platos" a cada uno de estos cuadros que forman cada popurrí de textos es muy acorde. Ya que con exquisito decir, Horacio Peña e Ingrid Pelicori saborean cada palabra de esos textos y demuestran, con naturalidad y sutileza, lo ideal que resulta en este tipo de espectáculos cuando el actor contiene al narrador y ese tránsito fino por la línea intermedia entre ambos.

La selección incluye textos de Marguerite Duras, Juan Gelman, Luis Cernuda, Lope de Vega, García Lorca y Alicia Steinberg, pasando por los bellísimos "Doce", de Oliverio Girondo (interpretado en forma excelente por Pelicori), y "¿Puedo tocar?", de E. E. Cummings; o "La vírgula", de Daniel Muxica, "Seducción", de Nikki Giovanni; "De la ascensión del amor a través de las escaleras", de Alberto Muñoz; "La hoguera donde arde una", de Julio Cortázar; "¿Qué es cosa y cosa?", de Luis de Góngora, o el anónimo Memorias de una princesa rusa , entre otros.

Martes eróticos es un espectáculo ideal para ir en pareja (o con una persona especial) y para permitirse que la intensidad de las palabras se mezclen con la de los sabores y de los momentos. Lógicamente, los sibaritas del erotismo ni deben dudarlo. Entretanto, aquellos que se ruborizan o se escandalizan fácilmente pueden ir si se dejan embriagar por la belleza literaria, si no, mejor quedarse en casa.

Pablo Gorlero

Grupo catalán pasea por Europa versión del ‘Tirant’ que descalifica urbanismo valenciano

Servicios Google/ LAS PROVINCIAS DIGITAL.Es.
Bieito, con el estreno de la obra en la cita cultural más importante de Europa, se suma a la campaña mediática contra la Comunitat
El director teatral Calixto Bieito llevará en septiembre a la Feria del Libro de Fráncfort una versión del Tirant lo Blanch que descalifica el urbanismo valenciana. El polémico artista, que critica la “especulación urbanística en la costa”, exhibirá posteriormente la obra en París./
Nuevo ataque al urbanismo de la Comunitat. En esta ocasión, la campaña mediática que ya se iniciara en 2005 y que ha causado pérdidas millonarias al turismo valenciano viene en forma de una representación teatral realizada por una empresa catalana. El montaje, una versión de Calixto Bieito del Tirant lo Blanch, pretende servirse de la obra maestra de Martorell para ofrecer una visión crítica del urbanismo de la Comunitat.

Bieito ha señalado a Efe que la adaptación teatral de la obra de Martorell será un “retablo o cantata sobre la vida y la muerte” puesto en escena por 14 intérpretes y en el que Tirant se enfrente a la realidad actual, y donde “imagino cómo vería ahora su Valencia natal, la costa valenciana de especulación inmobiliaria”.

Esta crítica adaptación viene a sumarse a la campaña contra el urbanismo de la costa valenciana que en nuestro país inició, hace dos años, con especial virulencia TVE, y que tuvo seguimiento internacional en periódicos ingleses, alemanes y norteamericanos.

Las consecuencias en la economía valenciana han sido nefastas. Por un lado, la inversión de los extranjeros que desean afincarse en la Comunitat o pasar épocas estivales se ha reducido notablemente. Por otro, el urbanismo de la Comunitat ha sido juzgado y debatido en el Parlamento Europeo e incluso un grupo de inspectores se han desplazado a viviendas de nuestro litoral para realizar investigaciones sistemáticas.

El pasado mes de julio, las declaraciones desde Barcelona sobre el hecho de que la obra de Martorell fuera “catalana” tuvieron una rápida reacción de protesta desde el Consell. En palabras del presidente del Consell Valencià de Cultura , Santiago Grisolía, “se falta a la verdad”. La novela caballeresca de Joanot Martorell “se escribió en valenciano antiguo y nadie puede mantener lo contrario”. Más tajante fue la consellera de Cultura, Trini Miró, quien consideró la iniciativa “una falta de respeto absoluta a las señas de identidad del pueblo valenciano”. Además, la consellera calificó el hecho como una “apropiación de un emblema cultural valenciano”.

Gira europea
La obra se estrenará primero en Berlín, el 27 de septiembre, y después en Fráncfort con motivo de la Feria del Libro, la cita editorial más importante en Europa. Tiene texto cantado y música de acompañamiento compuesta por el castellonense Carles Santos y dramaturgia de Marc Rosich. Es una coproducción con el Institut Ramon Llull y el Atrium de Viladecans que se presentará esta primavera en el Albéniz de Madrid y también en París.

Con la representación de la versión de Bieito de un clásico valenciano en Fráncfort y París, el daño a la imagen de la Comunitat acarreará de nuevo pérdidas millonarias al turismo. El ataque a los intereses valencianos se transforma esta vez en una pieza teatral y toma como base una obra cumbre de la literatura valenciana.

Bieito ve al personaje de Tirant como “el último caballero” y le hace acreedor de “una misión romántica” al considerar que con Tirant lo Blanch “se acabaron los caballeros”, idea que subyace también en la novela, “que describe un mundo en el que los caballeros y los valores que representaban tocan a su fin”.

Tirant será en escena Joan Negrié, un protagonista de rizos rubios que contrastará con la doncella de la que se enamora, representada por la cantante Beth, una mujer del futuro. La versión de la novela del autor valenciano se representará en catalán antiguo con subtítulos y con Negrié haciendo gala de “un acento precioso” del sur de Tarragona, remarcó .

El caballero “se pasa toda la obra intentando hacer el amor con la chica” y, cuando lo consigue y alcanza la victoria, “le llega la muerte por enfermedad y fallece en la cama”.

Tirant lo Blanch es, “sin duda, una de las mejores novelas de la literatura europea, podemos estar muy orgullosos de ella”, señaló el director, quien recordó que Cervantes decía de ella que “es una gran novela en la que los caballeros mueren en la cama y hacen testamento”. Bieito explicó que no intentó “volcarla toda, sino las partes que me conmueven, las más divertidas, en las que se puede captar el erotismo de la novela”, pues desde hace años concibe sus espectáculos como “un híbrido de muchas cosas y me alimento más de las artes plásticas, del cine, de la literatura y de la música, que para mí es fundamental, que del teatro”.

LAS PROVINCIAS ha tratado de ponerse en contacto con el director para preguntarle sobre la adaptación teatral de la obra de Martorell en la cita editorial con mayor repercusión en todo el calendario europeo. Bieito no ha respondido.

Monday, August 13, 2007

Leante: “La li teratura sirve para hacer mejores personas”

• El Premio Internacional Alfaguara presenta hoy su novela en la FIL. Habla de incomunicaciones y comunidades. Raquel Montenegro comentará “Mira si yo te querré”.

Nueve países en seis semanas. La gira es dura y no le da respiro; pero Luis Leante no se queja. “Me encanta conocer lugares diferentes, es un privilegio”, dice. La consecuencia es la fatiga: “un cansancio emocional por conocer amigos, encariñarte y despedirte”, comenta el escritor español en su primera visita a La Paz.

Desde marzo, Leante, un murciano de 44 años, ha vivido viajando gracias al Premio Alfaguara internacional de Novela que ganó con su obra Mira si yo te querré. Esta noche (20.00), en la sala Arzans de la FIL, el propio escritor presentará su historia de amor ambientada en el Sahara.

Su obra puede ser leída como un alegato en favor de los saharauis, ¿tiene una mirada compasiva al tercer mundo?
No, no es piedad lo que he tratado de transmitir. El tercer mundo que yo relato es el de un pueblo abandonado que vive con gran dignidad la injusticia que se ha cometido con ellos. Los saharauis no necesitan piedad, sino que el mundo conozca su drama, el éxodo que han padecido, el olvido que sufren por parte de la comunidad internacional y la fuerza de sus valores y sus reivindicaciones. No he pretendido provocar lástima en los lectores, sino rabia frente a la injusticia. Eso es lo que yo sentí cuando conocí de primera mano la situación de los refugiados.

¿Cómo desarrolla una historia de amor en ese contexto de absoluta violencia?
El amor es casi tan antiguo como el mundo. Estoy convencido de que el amor, cuando es fuerte, supera todas las fronteras y es capaz de hacer frente a todos los inconvenientes que surjan. Me parece que los sentimientos puros escapan a las modas, a las tendencias políticas, a las ideologías e incluso a las situaciones.

¿Cómo se puede mejorar la situación del Sahara?
El conflicto del Sahara sólo puede solucionarlo la comunidad internacional. Naciones Unidas ha estado jugando al ratón y al gato con Marruecos desde hace tres décadas. Ninguna de las resoluciones a favor de los saharaui, de la autodeterminación o del referéndum han sido respetadas.

Ha expresado su admiración por Vargas Llosa. ¿Qué otros referentes encuentra en la literatura latinoamericana?
Admiro a Vargas Llosa, de hecho fue un premio que él leyera y premiara mi novela como presidente del jurado del Alfaguara. Admiro al Vargas Llosa de antes y de ahora por su capacidad de evolucionar, en obras como Travesuras de una niña mala o El paraíso de la otra esquina, y reinventarse.
Creo que hay un movimiento literario que se está cuajando en Latinoamérica. Aquí descubro, sin embargo, que la producción de un país no pasa a su vecino, hay una incomunicación literaria tremenda.

¿Ve diferencias entre la literatura de España y América?
Hay diferencias entre la literatura latinoamericana y la española; pero hay diferencias entre las mismas literaturas latinoamericanas: Volpi es diferente a Vallejo, Restrepo es muy distinta a Rosero. No hay unidad y es mejor que no la haya pues cada literatura tiene su propia idiosincrasia. Yo no soy partidario de poner etiquetas o nacionalidades. Cortázar nada que ver con Borges siendo del mismo país.

¿Qué obras y autores conoce de la literatura boliviana?
Conocí la obra de Edmundo Paz Soldán y ahora voy a leer el Premio Nacional de Wilmer Urrelo. Tengo referencia de Marcelo Santa Cruz y pare de contar, y es que volvemos al problema de la incomunicación literaria.

¿Cómo ha cambiado su vida el premio Alfaguara?
En lo personal ha cambiado poco, porque he seguido trabajando como profesor de latín y haciendo una vida parecida a la que llevaba antes del premio, a excepción de los viajes. Estoy aprendiendo tanto, me parece un regalo. Pero en lo literario es un salto muy importante. La posibilidad de abrirme a un gran número de lectores y darme a conocer en diferentes países es un reto que me ilusiona, aunque me llena también de responsabilidad. Para la que ha cambiado es para mi hija, de cuatro años, que dice que su papá es un “escritor famoso”: escritor porque escribe y famoso por le sacan fotos en los periódicos.

Además de dar premios, ¿para qué sirve la literatura?
Escribir debe ser un acto de libertad. Básicamente debe transmitir emociones y pensar. Yo trato de transmitir sensaciones y sentimientos para que la otra persona reflexione. Más románticamente, la literatura sirve para hacer mejores personas, ayudarles a ver más allá de la manzana en que viven y, en fin, crecer.

El perfil

Trayectoria ¬
Luis Leante nació en Caravaca de la Cruz (Murcia, España) en 1963. Licenciado en Filología clásica, es profesor de latín en su natal ciudad de Alicante.

Sus obras ¬
Ha publicado los libros de relatos: “El último viaje de Efraín” (1986) y “El criador de canarios” (1996), y las novelas: “Caminos del jueves rojo” (1983), “Paisaje con río y Baracoa de fondo” (1997), “Al final del trayecto” (1997), “La edad de plata” (1998), “El canto zaigú” (2000), “El vuelo de las termitas” (2003) y “Academia Europa” (2003).

ARTE Y POESÍA, SEMILLERO DE JUVENTUD

Servicios Google/Prensa Latina, Revista Mujer

Por Mercedes Santos Moray

Cuando hace medio siglo caían, en cuestión de minutos, dos jóvenes hermanos, Luis y Sergio Saíz, ante las balas de la tiranía, con sólo 18 y 17 años, nadie podía entonces imaginar que de esa semilla brotarían miles de escritores y artistas como renuevo de la cultura cubana.

Y así lo testimonia la existencia, en las 14 provincias del país y en el municipio especial de la Isla de la Juventud, de una oleada que se renueva, constantemente, en la Asociación de Escritores y Artistas Hermanos Saíz, cuyos miembros, mujeres y hombres menores de 35 años, se manifiestan en diversos espacios de la literatura y del arte, desde la poesía al audiovisual, de la música a la plástica, de la danza y el ballet al teatro y a los medios de la televisión y la radio, como expresión de un amplio proceso de creación participativa que no es la sumatoria de números ni de individualidades, sino la manifestación del talento y de la sensibilidad.

Luis quería ser abogado y cursaba, cuando fue asesinado el 13 de agosto de 1957, el primer año de la carrera de Derecho en la Universidad de La Habana, mientras su hermano concluía su bachillerato con la aspiración de ser médico, y ambos, vinculados al Movimiento 26 de Julio, se integraban al heroísmo de la juventud, en medio de la difícil experiencia de la lucha clandestina.

Los dos escribían, versos y cuentos, trabajos periodísticos, eran apasionados lectores, y desde su imaginación cantaban a la vida y al amor, con la esperanza de un mundo más justo y más hermoso, legado que han hecho suyo otros jóvenes, los que nos reunimos en esa organización juvenil que agrupa a cuantos soñamos, también, con expresar nuestra fantasía y nuestra voluntad por la vía del arte y de la literatura.

Junto a nosotros, siempre, han estado sus padres, don Luis quien falleció hace unos años, siempre cálido y tierno, y aún nos acompaña su madre, doña Esther Montes de Oca, con sus 97 años, maestra dentro del aula y en la vida, mujer de fuerte espíritu, quien continuó el ejemplo heroico de Mariana Grajales, al perder a sus únicos hijos y que siempre nos estimula para que nosotros también sigamos a Luis y a Sergio, paradigmas y símbolos para la juventud, para las creadoras y los creadores cubanos de las nuevas generaciones, y así luchamos en defensa de una Humanidad alimentada por sentimientos de paz y no de odio.

Tuesday, August 07, 2007

Literatura para ver,escuchar y sentir

Servicios Google/LA NACION, Argentina

La emisión de esta noche, a las 21, de Cuentos contados , por Canal (á), está dedicada al mundo de Spencer Holst y su obra El idioma de los gatos . Se trata de un escritor norteamericano famoso por su talento para la narración breve, que acostumbraba leer en templos y cafés literarios de los barrios bajos de Nueva York. La actriz María Fiorentino leerá en esta emisión "La cebra cuentista", una de las narraciones de El idioma de los gatos .



Cuentos contados es un programa con invitados a los que se propone reflexionar, recordar y compartir con los televidentes las sensaciones que generaron en ellos diversos textos. El ciclo es realizado por el Centro de Producción Audiovisual de la Universidad Nacional de Tres de Febrero y Barrilete Producciones. Desde su estreno, en junio, importantes figuras (escritores, músicos, actores, directores de teatro) pasaron por las diferentes emisiones, y leyeron y comentaron sus cuentos favoritos y el porqué de su preferencia por esa obra. Entre esos nombres figuran, además del de la actriz María Fiorentino, los del actor y cantante Horacio Fontova, el cantante Juan Carlos Saravia, el actor Claudio Gallardou, la cantante Claudia Puyó, la actriz Lidia Catalano y su colega Roly Serrano. En la lista de los que se vienen en próximos programas figuran el músico Roberto Palo Pandolfo, el actor Coco Sily, el escritor Mempo Giardinelli y el dramaturgo Javier Daulte, entre otros.

«La ficción nos ayuda a recordar que estamos hechos de sueños»

Servicios Google/eldiariomontanes, España
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José María Merino recorrió en el Paraninfo de La Magdalena su universo literario como pretexto para auscultar el oficio de escritor
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«Uno con los años va aprendiendo algo del oficio», ironizaba ayer José María Merino antes de protagonizar una nueva jornada de los Martes Literarios, el ciclo con el que la UIMP y EL DIARIO MONTAÑÉS propician el encuentro semanal en La Magdalena con algunas de las firmas más relevantes de la literatura española contemporánea.

El narrador leonés regresó a Santander con su último trabajo, 'El lugar sin culpa', aún reciente; una obra, que ayer vertebró sus reflexiones en el Paraninfo, nacida tras un largo proceso y de la que el propio autor dudó si se trataba «de un cuento o un barrunto de novela», motivo por el cual permaneció durante varios años en el escritorio hasta que salió a la luz este año.

Además de servirle para ganar el premio Torrente Ballester, 'El lugar sin culpa' ha dejado una profunda huella en su autor, al que hizo dudar incluso, según reconoció ayer, sobre la diferencia entre el cuento y la novela: «Cuando me viene un cuento es como si fuera una iluminación», mientras que la novela «tiene mucho que ver con una investigación» y «se da vida a sí misma», de modo que es más difícil prever su evolución. Y 'El lugar sin culpa' pasó de cuento a «una novela muy larga» hasta transformarse en «una 'nouvelle' de menos de 200 páginas».

En su encuentro con los lectores, Merino (A Coruña, 1941) trazó «una reflexión sobre el qué de la creación literaria», con su propia obra como excusa, en un diálogo en el que pretendía llegar mucho más allá: al ejercicio de trasladar las ideas en palabras; a los rudimentos del oficio de escritor: «Para mí escribir es siempre difícil. El bolígrafo no se mueve solo, y la escritura es un esfuerzo físico, como trabajar con materiales, aunque las palabras no se puedan tocar; es un esfuerzo por plasmar materialmente algo que procede del mundo de las ideas».

Literatura infantil

A lo largo de su extensa carrera, el narrador también se ha detenido en la literatura infantil y juvenil, con varias incursiones en un género que «no consiste en hacer un producto edulcorado y lleno de diminutivos». Según su propia experiencia, «al escribir para niños las dificultades no son menores que al hacerlo para adultos. Hay que cambiar el código, utilizar palabras más sencillas y tal vez no complicar mucho el libro, pero también servir de introducción a la literatura». En definitiva, «hacer algo más accesible sin renunciar a los principios estéticos» ni a la «metaliteratura».

En todo momento, subrayó el valor de la ficción como «el modo originario en el que los seres humanos aprendemos a entender el mundo; y no un elemento de la cultura, sino que es el propio hombre el producto de la ficción».

El escritor de 'Las visiones de Lucrecia'y 'La orilla oscura' recordó que la literatura «lleva demostrando su eficacia, vigencia y fortaleza durante centenares de años»; y consideró que «la ficción ayuda a no olvidar que estamos hechos de sueños, a entender la realidad y a reconciliarnos con ella.

Realidades compatibles

El autor de 'El heredero' también se refirió a la eterna «crisis de la palabra escrita» y, en particular, al estado de salud del cuento, uno de los género que con más frecuencia y facilidad ha visitado: «El cuento literario es uno de los refinamientos de la ficción expresiva y como género es más antiguo que la propia novela», sostuvo el autor de 'Novela de Andrés Choz', quien se felicitó de que «ahora posee y vive cierto vigor entre autores consolidados y escritores jóvenes, aunque sea un género que no goza del favor editorial ni del de los lectores, que generalmente prefieren la novela».

Tampoco encuentra Merino ninguna contradicción entre el libro tradicional y las nuevas tecnologías, especialmente internet. De hecho, reivindicó este nuevo medio como un soporte perfecto para uno de sus géneros predilectos y recurrentes: el cuento. «Están apareciendo muchísimos microrrelatos y cuentos, porque su propia extensión favorece su penetración» en la red, de modo que auguró que internet supondrá «más profundización» en la creatividad. Su optimismo se tradujo también al futuro del papel como soporte y del libro como formato: «El papel seguirá vivo porque es un producto cómodo, barato, que gasta poca energía y que se puede transportar fácilmente», con lo que no se puede hablar de «problemas» entre ambas realidades.